
¿Te interesa saber sobre la glicina y todo lo que puedes hacer con ella? En este artículo la exploraremos contigo y te daremos ideas para que puedas decidir si vale o no la pena comprarla como ingrediente.
La glicina, conocida también como ácido aminoacético, es un aminoácido no esencial que nuestro cuerpo puede generar y sintetizar por sí mismo, aunque se puede encontrar y comprar como un polvo blanco cristalino, sin olor y con un sabor dulce.
La glicina es un nutriente esencial para el desarrollo y recuperación de la musculatura después del esfuerzo físico.
Este compuesto es vital para la formación y absorción de proteínas, lo que impacta directamente en la creación y reparación de todos nuestros tejidos corporales, desde músculos hasta huesos. Además, la glicina interviene en diversos procesos metabólicos y biológicos, siendo objeto de numerosos estudios e investigaciones.
Como verás a continuación, las propiedades y beneficios de la glicina son muy variados, e incluso es posible aplicar la glicina en diferentes industrias.
Por supuesto, esto no es lo único para lo que sirve la glicina, ya que como aminoácido tiene mucho protagonismo en varios usos de productos pensados para el ser humano.
La glicina tiene múltiples aplicaciones en diversas industrias, lo que la convierte en un ingrediente versátil y valioso.
En estos campos, la glicina se utiliza como reactivo en la preparación de soluciones tampón, esenciales para mantener el pH en diferentes experimentos y pruebas.
En la industria farmacéutica, la glicina es utilizada en la fabricación de medicamentos debido a sus propiedades regeneradoras y cicatrizantes. También se emplea en tratamientos para mejorar la salud de las articulaciones o la piel.
Es un componente clave en la síntesis de otros aminoácidos, actuando como intermediario en diversas reacciones químicas.
Se utiliza como agente de síntesis en la producción de pesticidas y fungicidas, debido a su capacidad para mejorar la eficacia de estos productos.
En la industria de fertilizantes, la glicina se usa como disolvente para eliminar el CO2, mejorando la eficiencia de los procesos de producción.
La glicina alimentaria tiene diferentes aplicaciones como aditivo, destacando por sus propiedades como potenciador del sabor, regulador del pH, humectante y antioxidante.
Gracias a sus iones anfipróticos, la glicina puede amortiguar la sensación de sal y vinagre, mejorando el perfil de sabor de varios alimentos.
Se utiliza en panificación, repostería y galletas, ayudando a mantener la frescura de estos productos.
La glicina tiene efectos inhibidores sobre Bacillus subtilis y E. coli, por lo que se usa como conservante en productos como surimi y mantequilla de cacahuete, con una dosis de entre el 1% y el 2%.
Al añadirse a la mantequilla, queso y margarina, prolonga la duración del almacenamiento de 3 a 4 veces.
La glicina betaína, otra variante de la glicina, ayuda a las plantas a manejar el estrés hídrico, reduciendo la pérdida de agua por evapotranspiración.
Regula la hidratación de la planta, evitando rajaduras en los frutos causadas por excesos o defectos de humedad, crucial durante el engorde de los frutos.
Si crees que puedes beneficiarte de las propiedades y usos de la glicina, te invitamos a comprarla en nuestra tienda. Tenemos estas variedades:
Como ves, la glicina es realmente muy interesante para muchos usos distintos. Esperamos que te dé los resultados que buscas y si tienes dudas sobre este u otros productos que ofrecemos, ponte en contacto con nosotros y te ayudaremos a elegir la mejor solución.